Con el proyecto de recuperación de los bosques, queremos otorgarle a la naturaleza un complemento extra. Los bosques, y en especial los árboles, no están experimentando uno de sus mejores momentos. Después de tres años de estudio (los especímenes de prueba, los grupos de control, los resultados gráficos de las pruebas), hemos identificado las variables más eficaces en un intento por crear un árbol más saludable. Pensemos en ello como en una evolución de la comunicación con la “Naturaleza” del futuro. Los estímulos procedentes de sonidos y proyecciones de la naturaleza nos permiten fomentar una máxima retención en las células de los especímenes de prueba. Partiendo de esta base, podemos empezar a cultivar superárboles en los entornos y biosferas simulados más eficaces. El género humano dispone ahora de la información necesaria para cultivar árboles jóvenes cuyas propiedades superen a las de sus predecesores gracias a estas nuevas invenciones. El diseño de OPAC, la audiometría proyectada ocular, está enfocado al cultivo de árboles de vivero durante todo su proceso y hasta que alcanzan la etapa de árboles jóvenes. Incluso, se puede cultivar una lupia de mayor tamaño a partir de varios especímenes de lupia seleccionados, como se puede apreciar en las unidades BAWR. Alojado en una formación de estímulos de la invención, se adoctrinará al espécimen de prueba mediante el uso de la voz y la imagen. Estos árboles, una vez han alcanzado el estado de árbol joven, disfrutarán de ciertas ventajas con respecto a aquéllos que no provengan de un vivero. Una vez transplantados en las zonas de reforestación correspondientes, estos árboles podrán considerarse una especie de superárboles con conocimiento previo de los peligros que la naturaleza pueda depararles.
Tony Bellaver